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La República Dominicana dio un paso decisivo hacia la consolidación de un ecosistema de innovación basado en la colaboración público–privada con el lanzamiento del programa Activa 4.0 – MIPYMES Industriales, impulsado por el Ministerio de Industria, Comercio y MIPYMES (MICM). Esta iniciativa busca fortalecer la competitividad de las micro, pequeñas y medianas industrias mediante asistencia técnica, capacitación especializada y adopción estratégica de tecnologías asociadas a la transformación digital y a la transición hacia la Industria 5.0, modelo que combina automatización avanzada con una centralidad renovada del talento humano.
El programa se fundamenta en el modelo de la Triple Hélice, que articula gobierno, academia e industria como motores de innovación y desarrollo territorial (Etzkowitz y Leydesdorff, 2000). En este caso, el MICM lidera la estrategia; la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) representa al sector productivo; y la Universidad del Caribe (UNICARIBE) aporta investigación aplicada, metodologías de intervención y formación del talento necesario para la modernización de las empresas industriales del país.
Un contexto productivo que exige transformación.
Las MIPYMES industriales enfrentan presiones crecientes relacionadas con estándares más altos de calidad, trazabilidad, sostenibilidad y tiempos de respuesta. Paralelamente, mantienen brechas importantes en digitalización, automatización y uso de datos, lo que limita la productividad, obstaculiza la integración en cadenas de valor y restringe la generación de empleos de calidad. A estas limitaciones se suma un déficit acumulado en la formación del talento humano en competencias digitales, innovación y gestión del cambio, aspectos fundamentales para impulsar procesos de transformación tecnológica.
El avance acelerado de la inteligencia artificial y la automatización incrementa la urgencia de actuar. El Foro Económico Mundial (2023) advierte la desaparición de empleos tradicionales, pero también proyecta la creación de ocupaciones vinculadas a servicios digitales, análisis de datos y actividades de alto valor agregado. Frente a este escenario, el reto no consiste en detener la transformación, sino en gestionarla de manera inclusiva, asegurando que la digitalización sea una oportunidad para las empresas y no un factor adicional de desigualdad productiva.
Marco teórico: de la Triple a la Sexta Hélice.
El modelo de Triple Hélice entiende la innovación como un proceso de co-evolución entre universidad, industria y gobierno. Su evolución condujo posteriormente a la Cuádruple Hélice, que incorpora la participación de la sociedad civil, y a la Quíntuple Hélice, que integra el medio ambiente como pilar del desarrollo sostenible (Carayannis y Campbell, 2009; Carayannis et al., 2012). Estas ampliaciones reconocen la necesidad de generar innovación responsable y alineada con el bienestar social y la sostenibilidad ecológica.
En un contexto globalizado y altamente interdependiente, Núñez (2025) propone la Sexta Hélice, que incorpora la vinculación internacional como componente estratégico para fortalecer la cooperación científica, el financiamiento, las redes globales y la diplomacia del conocimiento. Esta perspectiva amplía los alcances de la innovación al articular los niveles local, nacional e internacional, creando un marco que favorece la escalabilidad de iniciativas de Ciencia, Tecnología, Innovación y Emprendimiento (CTI+e).
Asimismo, conceptos como la innovación abierta (Chesbrough, 2003) enfatizan la importancia de los flujos bidireccionales de conocimiento; la teoría de capacidades dinámicas (Teece et al., 1997) explica la habilidad de las organizaciones para reconfigurar recursos y adaptarse; y la capacidad de absorción (Cohen y Levinthal, 1990) destaca la necesidad de asimilar conocimiento externo para innovar. La literatura sobre gobernanza de la vinculación (Guerrero y Urbano, 2017; Zahra y George, 2002) subraya la relevancia de estructuras e incentivos que aseguren continuidad, transparencia e impacto social.
Una alianza visionaria.
Activa 4.0 desarrollará durante cinco semanas talleres en tecnologías digitales para MIPYMES, asistencia técnica personalizada y un pilotaje con cinco empresas. Su propósito es diseñar, implementar y evaluar un modelo de transformación digital y organizacional sustentado en la colaboración de la triple y sexta hélice, fortaleciendo capacidades tecnológicas, humanas y sostenibles hacia la Industria 5.0. El programa coloca a las personas en el centro de la interacción con tecnologías inteligentes y funciona como un laboratorio vivo donde convergen digitalización, formación del talento e innovación sostenible. Los resultados del piloto servirán de base para escalar una política de Estado de transformación digital sostenida mediante la articulación efectiva de las hélices de la innovación.
Autores:
Dr. Rafael Nunez – Investigador Principal
Dr. Ricardo Ramirez y Dr. Emilio Minguez – Co-Investigador
